11 de agosto de 2011

Ciento veintitres.

Primeras semanas de Julio de 2011.

La verdad es que no tenía nada de ganas de ir a la guardia. Andaba con mucho trabajo y poco tiempo libre, y cada vez que tenía un ratito libre se me ocurría algo mucho más interesante que ir a sentarme un par de horas a calentar la silla en la sala de espera de una guardia esperando que me atendieran para contestarme lo obvio:

-No tenés nada, estás embarazada.

Además empecé a recordar que algunos años atrás había tenido un par de infecciones urinarias con síntomas parecidos, pero en esos casos me daban antibióticos y analgésicos y ahora no creía que pudiera tomar nada de eso. Y si era una infección urinaria se iba a poner más feo en los próximos días, ya me iba a enterar. De todos modos tenía turno con el Obstetra (el Dr. S.) en pocos días, así que mejor esperar. G. no estaba muy de acuerdo e insistía con que había que ir a la guardia igual, pero yo no tenía ganas. Y no fui nada.

Pasaron unos días y corrimos ansiosos al encuentro del simpático Dr. S. Por suerte a la semana siguiente ya teníamos turno con la otra Obstetra, la Dra. K. para poder escuchar una segunda opinión y decidir con cuál de los dos nos quedábamos. Pero había que ir por las dudas. Llegamos al consultorio y en el ascensor nomás nos atajó la secretaria con un hermoso comentario

-Miren que el Dr. está demorado porque viene de un parto…

Así que nos armamos de paciencia y nos sentamos en la sala de espera. Por suerte no fue para tanto. No más que lo de costumbre, por lo menos. Un poco menos de una hora de tedio y entramos al consultorio. El Dr. nos saludó y preguntó como estábamos. Le conté de mis dolores y mis sospechas por mis antecedentes de Infecciones Urinarias.

-Ah! Pero no me dijiste que habías tenido infecciones urinarias, tendrías que haber ido a la guardia igual… si es una infección puede generar contracciones…

La puta que te parió –logre reprimir apenas- sos vos el que me tiene que preguntar mis antecedentes, ¿yo cómo mierda sé cuáles son relevantes? No te voy a contar de cada vez que fui a un médico (ni aunque las recordara) porque estaríamos hasta el año próximo! Pero sonreí y solo atiné a contestar

-Me pareció que en la guardia me iban a tratar de tonta y me iban a decir que era algo normal del embarazo…

-Tonta no te van a decir…

-No, pero lo van a pensar…

Se sonrió.

-Igual cuando es así mejor andá por las dudas. Ahora te vamos a mandar a hacer un análisis de orina y un cultivo así nos quedamos tranquilos y vemos de qué se trata.

Dijo, mientras me invitaba a pasar al cuartito, me pesaba, me tocaba la panza y escuchaba los latidos del bebé. ¡Qué loco es eso! Sigo sin poder terminar de entender que es una personita dentro mío…

-Bueno, parece estar todo bien… Para la próxima les voy a pedir un Scan Fetal, es una ecografía pero más detallada. Yo prefiero que lo hagan con el Dr. M. que es Obstetra, en general en los otros lugares es un especialista en imagenes el que las hace y no presta tanta atención a algunos detalles. Estamos en la semana 19 ¿Ya lo sentiste moverse?

Dijo mientras me daba la orden.

-No, todavía no sentí nada.

Le contesté preocupada. Tal vez ya lo tendría que haber sentido. En todos lados decía que se empezaba a sentir entre la semana 16 y la 20.

-Ya lo vas a sentir… ¿Me quieren preguntar algo más?

-Si, le tengo que pedir una receta para una crema, que la que estoy usando se me está por terminar…

-¡Ah! ¡Qué imporrrtante…!

Dijo, con tonito irónico mientras garabateaba la receta. Este tipo me está tratando de pelotuda, lareputísimamadrequeloparió… pensé, mientras hacía un esfuerzo por no mandarlo a la mismísima concha de su madre. Hice unos segundos de silencio, tomé aire y seguí

-Y además necesitamos la orden para el estudio que tenemos que hacer con la cardióloga. Yo ya pedí el turno pero todavía no sé cómo se llama el estudio…

-Ah, si, si… -dijo mirando su fichita -el Ecocardiograma…

-Y para el análisis de orina también, no?

Pero la puta madre, te tengo que recordar todo yo? No, definitivamente no. Este médico no me convence nada de nada.

2 comentarios:

  1. ¿Será que la mayoría de los obstetras andan medio dormidos por la vida? (La mayoría de los partos ocurren de noche o madrugada, eso me dijo mi obstetra.)

    ResponderEliminar
  2. Familiarizada: Eso, o éste es un pelotudo importante. (O le importa un carajo) Como sea, por suerte ya lo cambié :)

    Besos!!

    M.

    ResponderEliminar

Sacate las ganas y decilo...